136 MEDITACIÓN A DISTANCIA
Sábado 7 de Septiembre de 2019
Hora: 17:30
Lugar: Donde tú te encuentres
DECRETO:
“YO SOY LA FUERZA DEL AMOR QUE IRRADIA ARMONÍA EN MI ENTORNO Y EN MI MUNDO CONSTANTEMENTE”
LA ENSEÑANZA:
“Ahora, como una actividad preparatoria para el día, sugiero que los discípulos, después de haber tomados sus desayunos, declaren en silencio lo siguiente, con gran animo y firmeza. Integrando que el poder de la afirmación se sostiene por sí mismo:
“Yo Soy el Amor, Sabiduría y Poder que gobiernan unidas con la actividad Inteligente que hoy actúan en todas las cosas que yo pienso y hago, yo pido que esta actividad Infinita esté constantemente presente, mantenga guardia constante sobre Mi y que yo me mueva, hable y actúe sólo en el orden Divino Y perfecto”.
“Es preciso que abráis la puerta para que el continuo Flujo de la Inteligente Presencia Interna transforme vuestro mundo y lo cuide a fin de que no se ponga en contacto con ninguna desarmonía. Haciendo así posible que mantengáis constantemente esa corriente interna de Paz y armonía en todo vuestro contacto externo”.
Maestro Saint Germain
“YO SOY LA FUERZA DEL AMOR QUE IRRADIA ARMONÍA EN MI ENTORNO Y EN MI MUNDO CONSTANTEMENTE”
Toda la enseñanza del Maestro se basa en la Fuerza del Amor, este principio nos pertenece y es el vehículo por le cual nos integramos a nuestro bienestar, y es el que trae como consecuencia la Paz y nuestra salud. Amarnos a nosotros mismos no es algo que tengamos incorporado como parte de nuestro patrimonio permanente. Y esta ausencia de pertenencia al amor nos hace recorrer caminos muy dolorosos o difíciles. Cada acto, pensamiento o palabra que no está conducido por el amor hacia nosotros mismos, siempre nos genera algún tipo de sufrimiento, que nosotros mismos nos generamos. Nuestra tarea de hoy es ser capaces de desarrollar la capacidad de identificar aquello que nos hace mal para alejarnos de nuestra existencia, modificar nuestros campos emocionales que son los grandes destructores de nuestra felicidad y dar paso al amor hacia nosotros mismos, instalando que el bienestar nos pertenece y lo merecemos.
Sugerimos que durante el mes sigamos la pauta del Maestro integrando el amor en todo lo que hacemos diariamente.
Una de las grandes fuerzas con las cuales se conoce la Llama Violeta es del AMOR LIBERADOR. Esto porque ella aleja de nuestra vida todas las creaciones a las que le hemos dado forma y nos mantienen atrapado en algún grado de sufrimiento y restablece nuestro vínculo con el bienestar que nos pertenece por derecho de conciencia.
Nuestra meditación está dirigida a trasmutar toda la energía mal calificada que nos aleja del amor hacia nosotros mismos.
“YO SOY LA FUERZA DEL AMOR QUE IRRADIA ARMONÍA EN MI ENTORNO Y EN MI MUNDO CONSTANTEMENTE”
MEDITACIÓN
Propósito. Establecer un vínculo de amor y unidad con la presencia Divina YO SOY y SENTIR ESTA FUERZA COMO PARTE DE NOSOTROS AHORA. SINTIENDO LA LLAMA VIOLETA COMO EL AMOR QUE NOS LIBERA.
Primer Paso: Aquietamiento.
Comencemos a respirar profundamente y pongamos nuestra atención en el recorrido que va haciendo el aire hasta llegar a nuestros pulmones. Llenando nuestro cuerpo de energía vital que se renueva con cada exhalación. Continuemos con las respiraciones, pero ahora sintamos que el aire está cargado con la fuerza de trasmutación de la Llama Violeta y que esa energía renueva todo tu cuerpo. Hazlo una 7 veces. Ahora siente que esta sintonía con la Llama Violeta te une a la Hueste de Seres Divinos.
“YO SOY LA FUERZA DEL AMOR QUE IRRADIA ARMONÍA EN MI ENTORNO Y EN MI MUNDO CONSTANTEMENTE”
Segundo paso: Invocación.
“Une tu conciencia a tu Presencia Divina YO SOY y únete a su fuerza de amor y fúndete con ella y desde esa unidad siente el decreto “YO SOY (pon aquí tú nombre), YO SOY LA FUERZA DE VIDA QUE LLENA MI CUERPO, MIS PENSAMIENTOS, MIS SENTIMIENTOS Y MI MUNDO CON LA ENERGÍA ELECTRÓNICA PURA DE LA LLAMA VIOLETA DEL AMOR LIBERADOR AHORA”, siente la respuesta de tu Presencia YO SOY, que establece un vínculo de amor contigo y tu responde con amor.
Desde este estado de conciencia Invoca:
“Amado Maestro Saint Germain, Amado Arcángel Zadquiel y Ángeles de la Llama Violeta, de todo corazón les pido que me asistan con la Llama violeta del Amor Liberador, para que tu divina Fuerza envuelva todo mi cuerpo, toda mi conciencia y Todo mi mundo con tu amor liberador para que todas mis acciones inarmoniosas se transmuten en paz, salud, alegría de vivir y amor hacia todo lo que me rodea. Les doy las gracias por la respuesta a mi llamado”. Siente tu cuerpo, tu mente, tus sentimientos llenos de esta Luz y siente la presencia de estos Divinos Seres al lado tuyo, siéntelos que están ahí y que te están asistiendo. Conversa con Ellos, plantéales lo que en tu vida requiere de su asistencia, integra su respuesta con:
“YO SOY LA FUERZA DEL AMOR QUE IRRADIA ARMONÍA EN MI ENTORNO Y EN MI MUNDO CONSTANTEMENTE”
Tercer paso: Abriéndonos al Amor del Maestro Saint Germain y de la Llama Violeta
Siente y visualiza tu cuerpo lleno de Luz Violeta del Amor Liberador. Siente que estás abastecido por las fuerzas de amor liberador de la Luz Violeta. Visualiza y siente que la Luz Violeta está en tus pies como un rayo Brillante de Amor Liberador , comienza ascender desde ahí a las pantorrillas, y a medida que lo hace, cada célula es un sol de luz violeta que va trasmutando toda la energía discordante que ahí está acumulada, llegas a las rodillas, los muslos y los glúteos y siente la intensa actividad de la Luz Violeta transmutando toda la energía de tus piernas en amor, en liberación; la Luz sigue subiendo y llega a tu estómago, la parte baja de tu espalda, al pecho soltando toda la energía aprisionada permitiendo que fluya la vida. Observa tus manos y siente la luz en ella en los brazos, hombros, cuello, todo tu cuerpo se llena de luz violeta, sigue subiendo por tu cabeza; ahora tus sentimientos, pensamientos y deseos son un foco gigante de luz Violeta del Amor Liberador que irradia a todo tu entorno.
Ahora estás en sintonía con el amor del Maestro, de los Ángeles de la Llama Violeta, siente que derribas todas las barreras que impiden experimentar el amor y eres uno con el Maestro, con la Llama Violeta, con la Fuerza del Amor Liberador y desde ahí canalízalo a los espacios que son tuyos que usas todos los días, para que la fuerza del amor liberador se instale ahí y no tengan cabida ninguna energía que no sea el amor de la Llama Violeta. Tu conciencia establece el vínculo, entre la fuerza del amor de la Llama Violeta y tus acciones en esos espacios.
“YO SOY LA FUERZA DEL AMOR QUE IRRADIA ARMONÍA EN MI ENTORNO Y EN MI MUNDO CONSTANTEMENTE”
Con el decreto fijas y sostiene el vínculo con el Maestro y la Llama Violeta.
Cuarto Paso: Agradecimiento y Cierre.
Siente que estas inmerso en esta fuerza de amor de los Seres de Luz y llénate de gratitud y amor hacia ellos. Hazlo con tus propias palabras que vayan unidos a un gran sentimiento. Junto a lo anterior pídeles que te asistan durante todos estos días para que estés en perfecta sintonía para recibir su bendición.
“YO SOY LA FUERZA DEL AMOR QUE IRRADIA ARMONÍA EN MI ENTORNO Y EN MI MUNDO CONSTANTEMENTE”
Ahora completas este servicio de la Llama Violeta con la gran Invocación, de esta manera estamos expandiendo la Fuerza del Amor Liberador de la Llama Violeta de los seres Divinos por todo el planeta para que se restablezcan las correctas relaciones Humanas y la reconciliación se instale en cada corazón humano. Con ella siente y visualiza que esta se expande por el mundo, por nuestro país, por la tierra, por las fuerzas elementales, actuando en esa área que cada estrofa lo indica.
LA GRAN INVOCACIÓN.
¡Que las Potencias de la Luz iluminen a la Humanidad!
¡Que el Espíritu de Paz se difunda por el Mundo!
¡Que el Espíritu de colaboración una a todos los hombres de Buena Voluntad, donde quiera que habiten!
¡Que el olvido de agravios y errores y la comprensión sean la tónica en la solución de los problemas del mundo!
¡Que el poder Infinito acompañe los esfuerzos de los servidores de la humanidad!
¡QUE ASI SEA!
¡Y CUMPLA YO MI PARTE!
Gracias y muchas bendiciones por ser parte de este Servicio de amor en tus espacios cotidianos, estás focalizando el Amor del Maestro.
